Dependiendo del ámbito de aplicación las técnicas de seguridad pueden ser:
1.-Generales polivalentes: si su aplicación es universal y pueden ser analíticas y operativas. Las analíticas tienen como objetivo la detección del riesgo e investigar las causas de los accidentes; y pueden ser de aplicación previa al accidente, en este sentido se mencionarán las inspecciones de seguridad, análisis de trabajo, análisis estadístico y análisis moral de trabajo. Las técnicas analíticas que se aplican con posterioridad al accidente serán la notificación y la investigación de lo sucedido.
Las técnicas operativas van dirigidas a la eliminación de las causas y, a través de las mismas, poder corregir el riesgo, pudiendo actuar a nivel de factores humanos o materiales.
Cuando tienen en cuenta el factor material, las técnicas operativas se pueden llamar según el caso, de concepción o de corrección. Las de concepción estarán presentes en el proyecto, diseño de los equipos y en el estudio de los métodos de trabajo. Por su parte las técnicas de corrección, atenderán a los sistemas de seguridad, señalización, resguardos, normas, protecciones personales y mantenimiento preventivo.
Cuando las técnicas atiende a factores humanos las encontraremos aplicándose a la selección de personal, estudiando las diferencias individuales, aplicando test de inteligencia, de personalidad, vocacional, etc.
Las técnicas operativas que estudian factores humanos también se pueden aplicar al estudio de cambios de comportamientos. En estos casos irán al estudio de los cambios comportamentales en los individuos; a los elementos, procesos y a la transferencia de aprendizaje; a la disciplina e incentivos; a la formación y a la propaganda.
2.- Especiales sectoriales: si su aplicación y validez se aplica a riesgos profesionales definidos y concretos.